En el presente artículo, la autora discute la importancia de los factores ESG como parte del manejo de las empresas, incluyendo su contribución en la búsqueda de una mayor rentabilidad en los negocios; y, en ese contexto, efectúa una digresión acerca de la inversión en gas natural dentro del ámbito de los criterios ESG.
En los últimos tiempos, la sustentabilidad o las consideraciones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés) se han convertido en una pieza fundamental del mercado financiero. La integración de los factores ESG ha tomado mayor relevancia en el mercado de capitales al alinear los portafolios de inversión con características que van más allá de los retornos financieros. Este cambio de enfoque es el resultado de un reconocimiento de los beneficios que el cumplimiento de los criterios ESG tiene para la rentabilidad de las empresas.
Esto no es simplemente una tendencia, sino un cambio significativo en la forma en que los inversionistas valoran y distribuyen su capital. Un análisis de riesgos emergentes sólido, la creación de valor a largo plazo, la generación de confianza con los grupos de interés, la eficiencia operacional, la reducción de costos, la transparencia y la rendición de cuentas son componentes esenciales de un sistema ESG sólido, agregando valor y seguridad a las inversiones. Ya no se puede obtener rentabilidad a expensas de la degradación ambiental, la injusticia social o la mala gestión corporativa.
Esta incorporación presenta una serie de desafíos, incluyendo la estandarización, la calidad de la información disponible y la alineación de objetivos a largo plazo. Sin embargo, este cambio está generando un panorama de inversión más resistente y responsable. La sostenibilidad no es opcional; es una necesidad estratégica.
Gas natural y ESG
Se puede considerar la inversión en gas natural dentro del ámbito de los criterios ESG. Se trata de un tema complejo con múltiples puntos de vista, y que no está exento de detractores. La inversión en gas natural desde el punto de vista ESG involucra:
- Impacto en el entorno. En comparación con otros combustibles, el gas natural es una opción más ecológica, ya que al quemarse produce menos gases de efecto invernadero. Sin embargo, es necesario trabajar activamente para reducir las fugas y emisiones de metano durante el proceso de producción.
- Impacto en la sociedad. Las áreas donde se reemplaza fuentes de energía más contaminantes y menos eficientes por gas natural muestran mejoras en la calidad de vida de sus residentes, con efectos positivos comprobados en problemas respiratorios y de salud en general. El uso del gas natural para cocinar y transportarse libera recursos económicos aumentando el poder adquisitivo de las familias, ya que su costo es mucho menor en comparación con otras alternativas. Su acceso facilita tareas domésticas como la cocina, el agua caliente y la calefacción liberando tiempo para actividades educativas y productivas, especialmente para las mujeres.
- Gestión. Las empresas involucradas en la extracción y distribución de gas natural deben cumplir con las regulaciones específicas y estándares relacionados con la protección ambiental, la seguridad de los trabajadores y el involucramiento de la comunidad. El cumplimiento de estas es verificado y reportado por supervisores independientes.
La forma cómo se gestiona la inversión y las prácticas de las empresas operadoras determinan si una inversión en gas natural se alinea con los principios ESG. Es aquí donde entra en escena el gas natural obtenido de forma responsable (Responsibly Sourced Gas, RSG), enfocado en fomentar la sostenibilidad en toda la cadena de suministro y reducir el daño ambiental.
Latinoamérica tiene, con sus abundantes recursos naturales, el potencial de convertirse en un actor destacado en el ámbito energético global, y el gas natural juega un papel importante en este panorama. Es necesario adoptar un enfoque integral y, si bien los desafíos persisten, el rico patrimonio natural de la región y su creciente compromiso con la sostenibilidad ofrecen oportunidades para fomentar un sector energético más sostenible e inclusivo.
En el Perú el acceso limitado a la energía perpetúa el ciclo de la pobreza. Por lo tanto, garantizar un acceso amplio y equitativo al gas natural puede ser una herramienta efectiva para combatir la pobreza y la privación energética.
Se puede aprovechar el potencial del gas natural para satisfacer nuestras necesidades energéticas y, al mismo tiempo, salvaguardar el medio ambiente y promover el desarrollo social al implementar prácticas de abastecimiento responsable. Los inversionistas pueden contribuir a la transición hacia un futuro energético más sostenible al apoyar a las empresas que adoptan prácticas sostenibles.
Tiffany Bayly
Asociada de WomenCEO Perú y Miembro de la Plataforma de Directores Perú
