La equidad de género en el Perú se encuentra en permanente riesgo, por ello los avances magros no pueden medirse con triunfalismo. La Política Nacional de Igualdad de Género (D.S. 008-2019-MIMP) reconoce que en el Perú existe discriminación estructural contra las mujeres y la concibe como el conjunto de costumbres, creencias, prejuicios y dogmas (incluso) religiosos en relación a lo que una mujer y un hombre deben ser y hacer y que son reproducidas en personas, instituciones y la sociedad en general. Se expresa en la violencia de género, la vulneración a la salud sexual y reproductiva; vulneración de derechos económicos y sociales; así como el limitado acceso y participación de las mujeres en espacios de decisión.
Para lograr un cambio estructural en la cultura de un país, se requiere de un liderazgo sostenido y vemos no solo en representantes del Estado, sino también en diversos líderes políticos y sociales que cuentan con antecedentes policiales sobre violencia de género, expresiones misóginas o posiciones conservadoras que cuestionan la equidad de género desde la educación y la vida en sociedad. Y si bien en el ámbito empresarial se vienen dando esfuerzos importantes para adoptar políticas de equidad de género, aun las brechas en posiciones gerenciales y directivas son muy marcadas, lo cual expresa que tales compromisos son poco sinceros.
El 2018, WomenCeo Per junto con PWC y CENTRUM PUCP realizamos el I Estudio sobre mujeres en directorios y dado los resultados del 9.2% de participación, lanzamos la iniciativa del 30% al 2030, con la adhesión de algunas entidades y creamos la Plataforma de Directores Perú un portal web que vincula a candidatas y candidatos con perfiles, trayectoria profesional y conciencia de género con empresas, la cual está muy activa. Sin embargo, estamos próximos a presentar nuestro II Estudio y anticipo que, pese al activismo, las premiaciones, los grupos forjados en el tema, el avance es ínfimo, lo cual muestra lo complicado que resulta quebrar las barreras estructurales de la discriminación. Por ello, desde WomenCeo Perú impulsamos con firmeza tres conceptos esenciales:
- Liderar con conciencia de género: en el ámbito de influencia que uno tiene puede y debe contribuir a eliminar los obstáculos estructurales contra las mujeres.
- Mujeres por más mujeres líderes: sororidad basada en la acción y resultados
- Liderazgo femenino: el mercado laboral exige de sus líderes habilidades y competencias muchas de las cuales son natas de las mujeres.
No podemos seguir tratando la equidad de género con medias tintas. Nos necesitamos a todas, todos y como se dice en lenguaje inclusivo, todes. Bien señala las Naciones Unidas que “la igualdad entre mujeres y hombres es un Derecho Humano esencial y el empoderamiento de la mujer, una herramienta para garantizarla”. Necesitamos identificar, apoyar e impulsar la presencia de personas caracterizadas por su liderazgo con conciencia de género, porque quien asume su rol transformador en una sociedad que lo requiere, concibe la vida a partir del respeto de la persona en su carácter único e irremplazable, y por tanto será un ejemplo a seguir por su compromiso ético.
La invitación está abierta a suscribir la Iniciativa 30%al2030 este mes de Abril; recurran a www.plataformadirectoresperu.com para que se inscriban como candidatas/os o encuentren a su talento directivo. Asuman un real y consistente compromiso por el cambio quebrando estructuras culturales injustas. Necesitamos de líderes comprometidos, inspiracionales, transformadores y activistas. No esperes a tener la posición. Donde te encuentres, puedes ser un gestor del cambio. La equidad de género no es una moda ni un cliché marketero. Es un real compromiso por el respeto de valores y el desarrollo de nuestro país.
Cecilia Flores.
Presidenta de WomenCeo Perú
Instituto Peruano de Empresas y Derechos Humanos – IPEDHU
Para la Revista Stakeholders